Ainer Marroquín / Mural Chiapas

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. 31 de Octubre del 2025 (muralchiapas.com).- Tamales de chipilín, cambray, de mole, picte, de bola, Toro Pinto o de verduras, son parte esencial de las ofrendas que cada 1 y 2 de noviembre se colocan en los altares de Día de Muertos.

Envueltos en hoja de maíz o de plátano, acompañados de pan de muerto, dulces típicos y calaveritas de azúcar, los tamales representan no solo el alimento que más disfrutaban los seres queridos que ya partieron, sino también el vínculo simbólico entre vivos y muertos que se reencuentran en torno a la mesa.

En los mercados públicos de Tuxtla Gutiérrez, las locatarias ofrecen este platillo tradicional a precios accesibles, elaborado con ingredientes regionales. Cristina Roblero Ruiz, locataria del Mercado del Norte, comentó:

“Los que gusten venir a comprar tamalitos, tenemos de bola, chipilín, de queso, pollo, rajas, cambray… también arroz con leche, champurrado, atol agrio o cafecito de la olla.”

Previo al Día de Muertos, la venta de tamales incrementa considerablemente, lo que representa un respiro económico para las familias que dependen de esta actividad, pues durante el resto del año las ventas suelen ser bajas.

“Gracias a Dios ya nos conocen y aquí los atendemos con mucho gusto, los tamalitos están llenos de amor”, expresó Cristina, quien desde hace 26 años se dedica a esta labor junto a su familia.

Gracias a este oficio, ha logrado sacar adelante a sus hijos y ofrecerles educación. Por ello, invita a la población a consumir en los mercados locales, donde cada compra contribuye a fortalecer la economía de las y los pequeños comerciantes chiapanecos.

-o00o-

***