La trufa, protagonista absoluta

Esta incorporación no es un simple añadido, sino una extensión natural del homenaje que el restaurante rinde a Auguste Escoffier, maestro de la cocina clásica del siglo XIX. Reconocido por la Fundación Auguste Escoffier como escaparate mundial de su legado, Les Grands Buffets integra la trufa en su repertorio histórico con platos que muestran la riqueza de su técnica y sabor.

Entre las nuevas propuestas se encuentran: la sopa en hojaldre con trufa y foie gras, el foie gras de pato semicocido con trufa, los huevos mimosa y el revuelto de huevos ecológicos con trufa, el oreiller de la Belle Aurore con trufa, la codorniz rellena Souvaroff con foie gras y trufa, la vieira a la nantés con trufa, el filete de buey con salsa Périgueux y trufa, el tournedó Rossini con foie gras y trufa, el volován Regencia con trufa, mollejas y colmenillas, y los quesos Brillat-Savarin y Brie de Meaux afinados con trufa.

Estas incorporaciones permiten que los comensales disfruten de la trufa en todas las etapas de la comida, desde entrantes hasta postres y quesos, dentro de un buffet a voluntad.

Un puente gastronómico entre Francia y España

Con una afluencia superior a los 400.000 comensales anuales, entre los que destacan más de 75.000 visitantes españoles, Les Grands Buffets se ha consolidado como el destino de referencia para quienes buscan la alta gastronomía desde una perspectiva accesible. La incorporación estratégica de la trufa en 14 de sus recetas históricas no solo busca democratizar el lujo al ofrecer un producto tan exclusivo de manera ilimitada, sino que también cumple la misión de preservar la herencia culinaria francesa mediante técnicas clásicas que resaltan cada matiz de la trufa. Con este movimiento, el restaurante refuerza su liderazgo internacional y garantiza una propuesta de valor única en el escenario de la gastronomía europea, elevando la experiencia del cliente a través de este codiciado ingrediente.

El alma del Languedoc: territorio y tradición

La llegada de la trufa a Les Grands Buffets no es casual, sino que hunde sus raíces en la profunda tradición del Languedoc, concretamente en el corazón del “triángulo mítico” formado por las tierras de Villeneuve-Minervois, Cabrespine y Trassanel. En este entorno privilegiado, generaciones de truficultores han custodiado con celo el secreto de este preciado manjar, cuya recolección es un arte que se remonta al siglo XVIII. Al integrar este tesoro local en su oferta, el restaurante no solo sirve un plato, sino que rinde homenaje al patrimonio vivo de su región, transformando un producto de la tierra en el máximo exponente de excelencia y orgullo gastronómico para sus comensales.

Una experiencia palaciega al alcance de todos

Esta apuesta por la exclusividad alcanza su máxima expresión al mantener el precio del menú en 65,90 euros, desafiando las convenciones del mercado de la alta cocina. Les Grands Buffets logra así una armonía perfecta entre el servicio palaciego de antaño y la generosidad de un buffet a voluntad, donde la cocina clásica francesa se vive con una intensidad sin precedentes. La incorporación de estas nuevas recetas refuerza su posición como un referente único en Europa: un espacio donde la historia culinaria y el lujo más refinado dejan de ser un privilegio de pocos para convertirse en una realidad compartida y al alcance de todos.