Las manos y los ojos son los más propensos a sufrir lesiones por la pirotecnia.
65% de las personas lesionadas por la pirotecnia fueron simples espectadores.
Los traumas o lesiones oculares requieren atención médica urgente.
Ciudad de México, 21 de diciembre de 2022.- Durante la temporada decembrina es común que niños y adultos festejen con fuegos artificiales, sin embargo, el uso de la pirotecnia puede causar desde accidentes en el hogar hasta daños físicos en las personas.
Al respecto la doctora Cristina Pacheco del Valle, Gerente Médico de las clínicas APEC puntualizó, “se estima que 14 por ciento de las lesiones por fuegos artificiales se producen en los ojos, generando un trauma ocular, el cual se define como una lesión provocada por golpes, cortes o quemaduras, que causan daño en el ojo y sus estructuras periféricas provocando en el peor de los casos deterioro visual o ceguera.
“Después de las manos, los ojos son la parte del cuerpo más recurrente en sufrir quemaduras a causa de los juegos pirotécnicos, además, las quemaduras oculares suelen ser muy dolorosas, pues la persona afectada tiende a mantener los párpados cerrados manteniendo la sustancia en el ojo durante un tiempo prolongado, situación que puede agravar el daño. Estas quemaduras pueden producir lesiones cicatriciales, perforación del ojo, infecciones y anomalías visuales,” agregó la doctora Pacheco, médico especialista en cornea y cirugía refractiva.
Aunque algunas lesiones son más evidentes que otras, los traumas oculares requieren atención médica urgente, sobre todo tratándose de quemaduras, por lo que no se debe aplicar ningún tipo de remedio casero, medicamento o intentar curar la zona afectada en casa. Lo más adecuado es colocar una protección con extrema precaución y acudir de inmediato con un especialista.
En APEC Hospital de la Ceguera se brinda atención prioritaria a las emergencias oftalmológicas las 24 horas del día, los 365 días del año, con un servicio digno y de calidad, sobre todo para quienes más lo necesitan.
Cabe mencionar que el uso de fuegos artificiales es un riesgo no sólo para quienes los manipulan, toda vez que el 65 por ciento de las personas lesionadas por la pirotecnia fueron simples espectadores, siendo niños y adultos jóvenes quienes tienen una mayor probabilidad de sufrir de un trauma ocular por quemadura.