CIUDAD DE MÉXICO. 20 de junio de 2022.- La Reserva Federal de los Estados Unidos (FED) tomó, el pasado 15 de junio, una decisión histórica: por primera vez en 28 años (desde noviembre de 1994) elevó en 75 puntos base la tasa de interés de los Fondos Federales.
¿Qué significa esto? Empecemos por entender que se trata del interés que el Banco Central estadounidense dicta para que los bancos se cobren entre sí por préstamos interbancarios.
Pero no es un interés impuesto por la FED, sino que se determina de acuerdo con las condiciones del mercado. En este caso, de acuerdo con Jerome Powell, presidente de dicho organismo, la decisión se toma para mitigar la inflación registrada a raíz de la crisis sanitaria y las afectaciones en las cadenas de suministro: el Departamento del Trabajo de Estados Unidos reportó que la inflación registró un 8.6% en mayo, el aumento más grande desde 1981.
Esto va a generar, desde luego, un impacto en la economía de nuestro país y en el tipo de cambio. Para México, el alza en las tasas de interés implica que los instrumentos de ahorro en dólares, como los bonos del tesoro, generen más rendimientos y sean más atractivos para los inversionistas. Es decir, la divisa estadounidense se vuelve más atractiva para la inversión, y de inmediato un peligro de depreciación del peso.
De hecho, de acuerdo con Bloomberg, el peso perdió 0.93% tras la decisión y amaneció el 16 de junio (día posterior al anuncio) cotizando en $20.43 pesos por dólar. En ventanilla bancaria, según Banamex, se cotizó ese día hasta en $20.87 pesos por unidad.
Proteger las exportaciones: prioridad de los empresarios
La posible depreciación del peso ante el dólar y la fluctuación esperada en las siguientes semanas implican un impacto directo a los costos de operación de las empresas exportadoras del país. Generalmente, las negociaciones de estas compañías se realizan en dólares, y los pagos que deben realizar para financiar este tipo de procesos también.
Para proteger las finanzas de este tipo de compañías y prever una reducción importante en la liquidez, Mundi recomienda hacer uso de coberturas cambiarias. Se trata de una herramienta que ‘congela’ al tipo de cambio en una fecha determinada para evitar que los posibles movimientos abruptos de la moneda impacten de forma negativa en las finanzas de la compañía.
De este modo, esta protección al tipo de cambio permite planificar el flujo de caja durante un periodo determinado para las exportaciones, de manera que el empresario se enfoque en el negocio y deje de preocuparse por factores externos que puedan afectar a la moneda.
Con este tipo de servicios financieros, las empresas mantienen una salud financiera positiva. Las coberturas cambiarias son herramientas que funcionan para todo tipo de empresas, sin importar que sea una pyme dispuesta a participar en mercados internacionales, o una gran corporación que realiza de manera constante diversas transacciones en mercados internacionales.
Esto sin duda es importante en un contexto de incertidumbre al respecto, y en donde la expectativa está en la posible respuesta del Banco de México y otros posibles movimientos del organismo central estadounidense, en las próximas semanas.
“Coyunturas como la que se vive actualmente generan incertidumbre en cuanto a la forma en la que puede fluctuar el valor del dólar sobre la moneda mexicana. Los cambios y depreciaciones pueden no únicamente ser drásticos, sino impredecibles. Es por eso que, ante un panorama tan incierto, las coberturas cambiarias pueden ayudar a las empresas a generar una estabilidad en cuanto al valor sobre el que van a operar durante un periodo determinado en el que realizarán sus exportaciones”, considera Paulina Aguilar, co-founder y directora de Mundi en México.
Para las empresas que realizan negociaciones con clientes en el extranjero y que utilizan el dólar como moneda para sus transacciones es fundamental tener una medida de protección para evitar riesgos que impacten directamente en sus operaciones, considerando el nerviosismo que existe actualmente en el tipo de cambio. Acudir a soluciones de este tipo, que además son 100% digitales, permite contener la fluctuación de forma rápida y transparente, así como facilitar los procesos operativos.