El Senador de Chiapas acompañó al candidato a diputado federal por el Distrito V, César Arrellano, en su declaración pública patrimonial, de intereses y de impuestos; pidió a la ciudadanía exigir el #3de3 a los que piden el voto
Comunicado
La campaña #3de3-Candidato Transparente, que impulsan el Instituto Mexicano para la Competitividad y Transparencia Mexicana a partir de la propuesta del Senador de Chiapas, Zoé Robledo, ha sumado ya a cinco candidatos chiapanecos, la mayoría del PRD.
En conferencia de prensa, y con motivo de la inscripción de César Arellano, candidato del PRD a diputado federal por el Distrito V, Robledo sostuvo que el principal objetivo es mandar un mensaje a la ciudadanía de que los candidatos están comprometidos con la transparencia.
“No es una campaña contra el dinero. Los aspirantes que tengan un patrimonio pueden demostrar lo que tienen y cómo fue que lo obtuvieron, y se comprometen a que al final de su gestión como diputados federales harán nuevamente el ejercicio. La idea es que demuestren que de manera lícita tienen lo que tienen y no a partir de los cargos públicos.”
El legislador chiapaneco afirmó que los candidatos transparente del Partido de la Revolución Democrática están superando el discurso de la transparencia y están realizando acciones concretas. Están presentando su declaración patrimonial, de intereses y de impuestos, a fin de demostrarle a la ciudadanía de que no buscan participar en la política para hacer dinero.
“La aspiración de César Arellano es legítima. Ustedes lo conocen. Su aspiración es dar una digna representación al Distrito 5 con cabecera en San Cristóbal de Las Casas. Una representación que en estos momentos no ha dado ningún resultado positivo. Busca recuperar la voz que no se ha tenido en los últimos tres años en el Congreso de la Unión.”
Finalmente, el parlamentario recomendó a la ciudadanía que exija el #3de3 a cada candidato antes de emitir su voto. Que la transparencia se convierta en la llave para entrar en la política y el único sustento para continuar en ella: “Si no hay nada que esconder, no hay nada que temer”.
