A tres días de la denuncia en contra de un conductor que intentó atropellar a niños, el personal del químico Carlos Esquinca, no ha actuado.

Por Alberto Noriega

Autoridades de Tránsito y de Seguridad Municipal han hecho caso omiso de la denuncia presentada por padres de los niños, al que un chófer del colectivo de la ruta 4107 intentó atropellar el pasado viernes a las 6 de la tarde cuando realizaban una caminata en la calle que conduce a las faldas del cerro Mactumatza, en la colonia del mismo nombre.

En el seguimiento del caso, a dos días de los hechos, los familiares de los niños -cuyas edades oscilan entre 10 y 12 años- llamaron de nueva cuenta para solicitar información, sin embargo, la respuesta fue: “que ya se había transmitido la solicitud de apoyo a las unidades de Tránsito y Seguridad Pública Municipal, y que tendríamos que recurrir a ellos para saber que pasó”.

La intención de los padres de familia es que el acto no quede impune y tanto el chófer como el dueño del colectivo sean sujetos a una sanción, ¿Cómo actuaría el director de Tránsito Carlos Esquinca si a alguno de sus hijos le hubiera pasado?, ¿o están esperando que resulte una persona muerta para actuar?, cuestionaron los padres.

“No queremos pensar mal, pero todo parece indicar que ya se arreglaron con los agentes de tránsito, ya que la unidad sigue prestando el servicio como si nada hubiera pasado”.

Señalaron que este tipo de omisión en el actuar de las autoridades -por negligencia o corrupción- ha provocado que la ciudadanía tome justicia por su propia mano, por lo que piden al director de Tránsito, el químico Carlos Esquinca a que actúe en consecuencia.

Cabe destacar que tal como quedó registrado en la solicitud de emergencia realizada al 060, un grupo de niños que realizaba una caminata a orillas de la carretera que conduce al cerro Mactumatza -a 200 metros de las instalaciones de TV AZTECA y TELEVISA- fueron víctimas de un cafre del volante que a bordo de la unidad 4107 de la ruta Santa Ana, intentó atropellarlos.

Los sujetos-probablemente bajo el influjo de alguna droga o alcohol- al no tener éxito en su primer intento, dieron vuelta al vehículo y por segunda ocasión intentaron atropellar a los menores, afortunadamente los niños resultaron ilesos.

De inmediato y ante las amenazas de agresión de los sujetos, los familiares realizaron una llamada al servicio de emergencias 060 para reportarlos, donde la persona encargada tomó los datos y prometió enviar una patrulla, “la cual nunca llegó”.