* En comunidades indígenas se sigue condicionando el voto de las mujeres por razones de usos y costumbres.
Tuxtla Gutiérrez, Chis./ Alejandra Soriano, presidenta de la Comisión de Equidad y Género del Congreso del estado dijo que es necesario que en el proceso electoral a celebrarse el próximo 19 de junio se garantice el voto libre y secreto de las mujeres, principalmente indígenas, donde aún se sigue condicionando este derecho por razones de usos y costumbres.
En este sentido, Alejandra Soriano refirió que de acuerdo a los datos dados a conocer por la agencia de noticias Chiapas Paralelo, en el 60 por ciento de las secciones electorales se observaron anomalías de leves a graves en los comicios electorales entre los que se incluyen acuerdos comunitarios y la amenaza de que se les corten los servicios básicos o sean exiliadas de su ejido, entre otras represalias y amenazas.
En una investigación que comprendió los municipios de Chenalhó, Larráinzar, Zinacantán, San Juan Cancuc, Venustiano Carranza, San Cristóbal de las Casas, Tenejapa, Ocosingo, Berriozábal, Copainalá y Villa Corzo, citado por la agencia informativa, se recurrió a los acuerdos comunitarios, donde los hombres son los encargados de negociar el voto, asimismo las mujeres se ven obligadas a votar por el partido o candidato del jefe de familia.
En un acto de sumisión las mujeres indígenas y ante la falta de conocimiento pleno de sus derechos político electorales e instituciones electorales que garanticen un ejercicio democrático, así como el temor de que les corten la luz, el agua o las corran de su ejido, se ven en la necesidad de ser víctimas de estas prácticas corruptas, ejerciendo su voto de manera obligada y manipulada, refirió la presidenta de la Comisión de Equidad y Género.
Acentuó que en esta materia es indispensable y urgente que las autoridades electorales vigilen de cerca el próximo proceso electoral con un enfoque de género, además de fomentar los programas, mecanismos e instituciones que permitan concienciar a las comunidades de este libre derecho, pues las mujeres no pueden ser más tratadas como un objeto sino como sujetes libres, autónomos e independientes con el pleno derecho de decidir quien quiere que los represente, sin temor a sufrir represalias por ello, enfatizó.
