* Sólo el 28 por ciento de los empleos en tecnologías de la información (TI) son ocupados por mujeres.
* La brecha salarial en áreas STEM persiste: por cada 100 pesos que gana un hombre, una mujer percibe 82.
Ainer Marroquín / Mural Chiapas
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. 10 de Marzo del 2025 (muralchiapas.com).- En la era de la digitalización, la tecnología no sólo transforma la vida cotidiana, sino que también define el desarrollo económico y la competitividad de los países. Sin embargo, en México, este sector enfrenta una paradoja: mientras la demanda de talento en tecnologías de la información y comunicación (TIC) crece aceleradamente, la brecha de género sigue siendo un obstáculo latente. A pesar de su contribución histórica a la ciencia y la tecnología, las mujeres continúan subrepresentadas en un campo que, lejos de ser exclusivo, requiere diversidad y equidad para su evolución.
Datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) de 2020 indican que en el país hay aproximadamente 980 mil especialistas en TIC. Sin embargo, esta cifra resulta insuficiente para cubrir la creciente demanda de talento en un mercado laboral que se expande con rapidez. La brecha no sólo radica en la falta de profesionales, sino en la baja presencia de mujeres en estas áreas clave.
Asimismo, el informe Radiografía de las Mujeres en el Trabajo 2025, elaborado por Buk, señala que en el país sólo el 28 por ciento de los empleos en el sector TI son ocupados por mujeres. Además, refiere que la desigualdad salarial sigue siendo una constante, ya que por cada 100 pesos que percibe un hombre en áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés), una mujer gana en promedio 82. Estas cifras, según el estudio, evidencian una brecha estructural que no sólo afecta la equidad, sino que también limita el potencial innovador del sector al desaprovechar el talento femenino.
El impacto de esta disparidad también ha sido documentado por organismos como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que expone que la diversidad en equipos de tecnología y ciencia está asociada con un incremento en la productividad y la rentabilidad de las empresas. Un informe del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) de 2024 destaca que los países con mayor equidad de género en sectores tecnológicos presentan un crecimiento más acelerado en innovación y competitividad.
A nivel educativo, la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (Anuies) reporta que, aunque el número de mujeres matriculadas en carreras STEM ha crecido en la última década, aún representan menos del 35 por ciento del total de estudiantes en estas áreas. Este dato refleja un desafío estructural que comienza desde la formación académica y se traduce en una menor participación en el ámbito laboral.
En el contexto empresarial, un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en América Latina encontró que las empresas con mayor presencia femenina en puestos tecnológicos muestran mejores indicadores de desempeño en innovación. Sin embargo, en México, la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CANIETI) reporta que las mujeres ocupan menos del 10 por ciento de los puestos directivos en el sector TI, lo que limita su acceso a la toma de decisiones estratégicas.
Mientras la demanda de talento en el sector tecnológico sigue en aumento, los datos muestran que la participación femenina aún enfrenta múltiples barreras. Organismos internacionales y especialistas han señalado que reducir esta brecha podría generar beneficios en productividad y competitividad; no obstante, los indicadores actuales reflejan que los avances en equidad de género dentro del sector siguen siendo limitados.
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