* Javier y Jacob Moreno, son parte fundamental en la preservación de tradiciones en Chiapa de Corzo, han dedicado gran parte de su vida en la elaboración de máscaras de parachico, personaje mítico de esta localidad chiapaneca.
Ainer Marroquín / Mural Chiapas
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. 15 de enero del 2024 (muralchiapas.com).- El señor Javier Moreno conocido en su natal Chiapa de Corzo como "El Mascarita", desde hace 50 años se dedica a la elaboración de las máscaras de Parachico, oficio heredado por su padre y transmitido a su hijo Jacob Moreno, quienes en conjunto han recibido más de 30 reconocimientos, premios y menciones honoríficas.
Aunque el gusto lo heredó de su padre, su mentor fue don Antonio López Hernández, quien es considerado como el mejor mascarero de Chiapa de Corzo.
“Estuve en el 73, 74 a 77, cuatro años, pero sí aprendí mucho, mucho, todos sus secretos”.
Con él estudió incluso una carrera técnica y recibió un reconocimiento por parte de la SEP, sin embargo, su preparación no terminó ahí, don Javier continuó por más de nueve años preparándose hasta que finalmente con todo lo aprendido y con el miedo de no saber si funcionará o no, decidió emprender su propio taller, mismo que hoy en día mantiene y en donde trabaja junto a su hijo.
“En ese tiempo no se veía que íbamos a ganar mucho dinero, sino que era porque quería uno aprender, la verdad. Se pica mucha piedra, se va aprendiendo… a través del tiempo ya ve uno el fruto del trabajo”.
Realizar una máscara de Parachico es un trabajo complejo que lleva varias semanas poder elaborarla, pues todo el proceso es artesanal, desde el tallado de la madera de árbol de cedro, hasta la pintura con óleo y los detalles, estos últimos de acuerdo al gusto del cliente.
“Detallar todo lo que es el piloteado, donde van las comisuras de la nariz, los ojos, después va a pintura, la primera mano que es la base, después la pintura al óleo con el vejigazo”.
Javier y Jacob Moreno, elaboran de dos a tres máscaras al mes, sin embargo, son los meses de noviembre, diciembre y parte de enero en donde más trabajo tienen y llegan a realizar hasta 15 máscaras, no obstante, el tiempo invertido en su trabajo para obtener dicho resultado es de más de 14 horas diarias.
“Cuando un cliente me dice que la máscara le encantó, me satisface mucho que fue de su agrado la obra que hice y también que sigo preservando la tradición familiar”.
El precio por cada máscara también varía, dependiendo de los detalles o tamaño de la misma, pero, el trabajo que los Moreno desempeñan llega a costar entre nueve hasta 12 mil pesos, precio que la gente paga al conocer la calidad de su trabajo.
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