POR: ALBERTO RAMOS GARCÍA
 
SERÁ FERNANDO, PACO, O WILLY, EL ALCALDE TUXTLECO?
 
Llegó el momento de que quienes aspiren a regir los destinos de Tuxtla Gutiérrez comiencen a hablar claro y a exponer sus planes y proyectos concretos, más allá de las generalidades o si cuentan o no con el respaldo de un partido político, del Gobierno o de los partidos de oposición al PVEM que está en el poder

Creo que si los aspirantes mantienen esa tendencia de ser ciegos, mudos,  y paralíticos, los tuxtlecos irán perdiendo el interés. En esos términos, no será claro el panorama que nos espera. Hasta el momento hay tres nombres que se perfilan: el exalcalde Francisco Paco Rojas, quien ya tomó una decisión definitiva sobre su aspiración, pero lo más probable es que sí lo haga va a ser por el Partido Acción Nacional(PAN), a pesar de las propuestas del Movimiento Ciudadano y del Partido de la Revolución Democrática(PRD) ; el Diputado Fernando Castellanos Cal y Mayor, candidato del partido político en el Poder; y el Diputado Federal Willy Ochoa, que sigue la línea del Coordinador de la Banca de los legisladores del PRI en Cámara de Diputados…Sin duda que, desde el punto de vista personal, los cuatro no tienen tacha moral, distinta a estar con un partido u organización con la que no se pueda estar de acuerdo, pero que no los inhabilita para llegar al Palacio Municipal. Ese no es el asunto o lo que definirá el futuro a
lcalde y, con esa decisión, el futuro de la capital, que representa mucho para el Chiapas.

Hay que hacer una primera precisión contundente: Fernando Castellanos Cal y Mayor no tiene nada ganado por ser el candidato del partido del Gobernador en turno ni se puede argumentar que lo será por tener la maquinaria oficial, sin embargo, es el candidato a vencer; Paco Rojas tampoco tiene ventaja por el simple hecho de haber sido alcalde y tener el reconocimiento de haber hecho cosas buenas en su momento; en el caso de Willy Ochoa, estar como “aliado” del Gobierno o al lado de los Verdes, no le da más ni menos oportunidades, ya verá del porqué les comento en párrafos inferiores

Hasta ahora, hay generalidades que no pone a ninguno adelante de los demás. Paco Rojas dice que va a unir a los tuxtlecos y tuxtlecas y que será un gerente del pueblo; Willy Ochoa le pide imparcialidad al Gobierno que no pretenda “bajarlo” de la candidatura por esa campaña de desesperación de espectaculares y de spots de radio a favor de Bayardo Robles Riqué, y sus prioridades son la movilidad y la seguridad de los tuxtlecos. Fernando Castellanos tiene carisma y presencia y tiene que decidirse por caminar solo en todo terreno y que haya aprendido que el golpeteo del “fuego amigo” le servirá en el terreno político, para sortear diferentes vicisitudes, y porqué no decirlo,  le ha costado varios quebrantos y lagrimas

Los tuxtlecos y tuxtlecas de nacimiento o de adopción esperamos propuestas y planes para la ciudad del futuro, más allá de la coyuntura, en temas como la competitividad, de la cual la movilidad es solo un asunto y la vocación productiva es otro. Por encima de todo, esperamos un líder con carisma que empuje, levante el ánimo de la gente, maneje las relaciones con el Gobierno Estatal y Nacional y proyecte la ciudad al exterior, para lo cual debe tener atributos que no se puedan ocultar.

Quedan cuatro meses para las elecciones y a la fecha nadie ha picado en punta. Por ahora, cada vez hay más ciudadanos creyendo que no importa la filiación política para escoger al alcalde, sino lo que propongan. Será un gran avance para alcanzar una Tuxtla con más progreso, modernidad, y servicios públicos de primer nivel, como seguridad.

De cualquier forma, se requiere la solidaridad y ganas de que la ciudad mejore. Y para ello la condición es que la gente vote, lo cual da el derecho a criticar y cuestionar.

Finalmente: La Feria de Sabines sepultó a la Feria Internacional de Tapachula, nos leemos mañana, Dios mediante.

PD.- Alguien, le creyó a ese lunático que llenó la plaza de Santo Domingo de Sancristóbal de Las Casas, con 10 mil personas, ni la Foja Coleta, tomó en serio esa broma electorera