Es un escenario de violencia que ha alcanzado a las niñas, niños y adolescentes de Chiapas, las desapariciones de menores de edad durante los últimos meses en la entidad también han reportado un incremento alarmante, duplicando este año la cantidad de casos vigentes registrados en 2023.

Y es que, aunque las denuncias sobre desapariciones de niñas, niños y adolescentes responden a diversas causas, lo que ha encendido las alarmas entre las organizaciones civiles de protección a las infancias es justo el drástico repunte durante este año electoral, en el que también se ha registrado un aumento de la violencia emanada del crimen organizado.

A decir de la Red por los Derechos de las Infancias y Adolescencias en Chiapas (REDIAS), actualmente existe una mayor preocupación debido al incremento de la violencia criminal ejercida contra las niñas, niños y adolescentes de la entidad, especialmente en materia de ataques armados y desapariciones.

De acuerdo con datos oficiales del Registro Nacional de Personas Desaparecidas de la Secretaría de Gobernación, tan sólo entre enero y el 31 de octubre de este 2024 se contabilizaron 663 denuncias en Chiapas por desaparición de personas menores de 18 años.

De esa cifra general de denuncias, un total de 208 continúan vigentes. Es decir, actualmente más de 200 niños y jóvenes siguen sin aparecer. Sin embargo, el dato más perturbador que ofrecen este año las cifras oficiales tiene que ver con que, hasta el momento, son 11 las y los menores de edad en Chiapas que este año han sido finalmente localizados sin vida.

Y es que, si bien es cierto que en cuanto a denuncias interpuestas hubo una leve reducción este año, en lo que respecta a denuncias por casos que continúan sin resolverse la cifra se disparó en casi un 90%. Es decir, que los menores que están desapareciendo recientemente en la entidad, no están apareciendo con la misma frecuencia que en años anteriores.

En cuanto a los municipios con más denuncias, la capital Tuxtla ocupa el primer lugar, con 130; le sigue Tapachula, en la frontera sur, con 74 casos, de los cuales 39 corresponden a mujeres adolescentes o jovencitas; y en tercer lugar esta San Cristóbal de las Casas, con 51 casos, de los que poco más de la mitad también son mujeres en el mismo rango de edad.

Según REDIAS, la edad más frecuente de desaparición es de 17 años, seguida por los rangos de 12 a 16 años. Por ende, los adolescentes están particularmente en mayor riesgo, posiblemente debido a factores como la búsqueda de independencia y, en el caso de entidades como Chiapas, por el acoso o el engaño por parte de redes criminales que buscan su reclutamiento para actividades ilícitas.

Se trata de un escenario de vulnerabilidad que mantiene a las y los niños de Chiapas bajo circunstancias de riesgo incrementado, con al menos tres ejecuciones de menores de edad en los últimos 40 días y numerosos episodios más de violencia dentro de entornos que hasta hace sólo unos cuantos años eran considerados seguros.

Con 11 niños, niñas y adolescentes localizados sin vida luego de ser reportados como desaparecidos tan sólo durante este año en Chiapas, las organizaciones civiles no tienen dudas en asegurar que las alertas para la niñez chiapaneca se encuentran hoy en uno de sus peores momentos. Todo, en medio de un círculo de violencia generalizada que, aseguran, sólo podrá ser combatida con un compromiso real de los tres niveles de gobierno… así las cosas.