ADAMARI: De repente: Los medios, analistas y conductores que poco faltaba para que le mentaran la madre a AMLO en los días previos a las elecciones, hablan de la “victoria contundente”, “arrolladora” y limpia, sobre todo, poniéndola como símbolo de la democracia.
De repente, en todas partes a donde el presidente la lleva, el tumulto grita “¡presidenta!”, “¡presidenta!”, en señal de que todo el mundo está feliz.
De repente, aunque los mercados financieros caen por el anuncio de la reforma judicial y otras más al modo “me canso, ganso”, la presidenta dice que no hay que temer; que la economía está muy sólida y que la reforma judicial se hará mediante una encuesta, sobre la cual los cuestionarios ya circulan y en ellos se lee clarita la inducción al voto en contra de los “piratas” del Poder Judicial.
De repente, la presidenta, envalentonada, asume la costumbre de AMLO de decir “sí” a todo lo que le dicen y recomiendan los emisarios de BIDEN, y luego a sus espaldas ha de decir “me vale”.
De repente ya “todo el mundo” canta aleluya porque la victoria de la 4 T traerá delicias para la vida cotidiana.
De repente, la “elección” de ministros, magistrados y miembros de la judicatura ya convenció al pueblo noble y leal que es para desterrar la corrupción, y no para que el poder sea de un solo hombre.
De repente, los partidos políticos y sus “dirigentes” se dieron cuenta que no representan a nadie y que hay que cambiar, hasta de nombre, si se puede.
De repente, todos “se convencieron” de que se acabaron los problemas del país, porque no sólo estamos a un tris de ser mejores que la salud de Dinamarca, sino que la nueva educación se encargará de hacer niños genios para que sean adultos con una inteligencia superior a la artificial.
El asombro y el miedo ya pasaron. Que todo se haga como quiere el mesías. Finalmente, él sólo desea que todos nos amemos. Que seamos la República de la felicidad.
México ha festejado con beneplácito el beso del presidente a la presidenta, más que el que le dio NODAL a ÁNGELA AGUILAR. No así el gesto de desagrado de la presidenta como diciendo “qué onda”. “¿cómo se atreve a hacer casi fuchi, cuando el beso viene del mesías?”, muchos preguntaron.
Presidente y presidenta andan envalentonados, porque el “triunfo arrollador”, en el que votaron hasta los huéspedes de muchos panteones, permitió no sólo borrar a la oposición, sino de darle a MORENA y secuaces una sobre representación en el Congreso, lo cual le permitirá al presidente hacer lo que le venga en gana sin que se cambie a sus iniciativas una sola coma.
La presidenta se siente apoyada por el Grupo Puebla, que se encargará con el presidente, perdón con el ex presidente, dictar las estrategias políticas e ideológicas de México.
El Grupo Puebla, creado el 14 de julio de 2019 en la Ciudad de los ángeles, las chalupas, las pelona, los camotes y los chiles en nogada, es un foro contra los gobiernos neoliberales, que insisten en promover los intereses y privilegios de una élite socioeconómica, a costillas del desarrollo de nuestros pueblos, frustrando sus posibilidades de desarrollo y bienestar social, a la vez que debilita nuestra soberanía, nuestras instituciones democráticas, el Estado de Derecho, la vigencia de los derechos humanos y el ambiente.
En sus primeras declaraciones, el Grupo Puebla rechazó cualquier acción en contra de Venezuela, lo cual ya nos da una idea clara de dónde viene y qué quiere. Rechaza “cualquier intento de uso de la fuerza que quebrante el principio de solución pacífica de las controversias y que posibilite una intervención militar en Venezuela por parte de fuerzas extranjeras, incluida la invocación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), instrumento arcaico para intervenciones militares en países de América Latina durante la Guerra Fría”.
Grupo de Puebla es un foro político, cuyo objetivo principal es “articular ideas, modelos productivos, programas de desarrollo y políticas de Estado de carácter progresista”. Su eslogan es: “¡Cambio ahora!”
A partir de su creación se ha reunido unas diez veces. La novena volvió a ser en Puebla los días 1, 2 y 3 de octubre de 2023, en la cual estuvo como invitada de honor la hoy señora presidenta virtual.
El Grupo de Puebla tiene 170 miembros. Entre sus participantes destacan EVO MORALES, expresidente de Bolivia; ERNESTO SAMPER, expresidente de Colombia; LUIS GUILLERMO SOLIS, expresidente de Costa Rica; RAFAEL CORREA, expresidente de Ecuador; el recién detenido MANUEL ZELAYA, expresidente de Honduras; MARTIN TORRIJOS, expresidente de Panamá; FERNANDO LUGO, expresidente de Paraguay; JOSE MÚJICA, expresidente de Uruguay; la ex Vicepresidenta argentina CRISTINA FERNÁNDEZ; el Presidente de Brasil, LULA DA SILVA; el Presidente de Colombia, GUSTAVO PETRO, y la canciller mexicana ALICIA BÁRCENA, entre otros. Por supuesto, don AMLO.