* El caso del periodista Silvano Bautista Ibarias, demuestra que la libertad de expresión es un cero a la izquierda en Chiapas, por lo que tanto la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) y la Fiscalía General del Estado, deben adoptar las Medidas Precautorias para preservar la integridad física y moral tanto del compañero periodista Silvano Bautista Ibarias, así como de su familia. Qué triste que “nuestros representantes populares”, resten importancia a esta situación y permitan de nueva cuenta el abuso de poder.
* En el Día Mundial Contra el Trabajo Infantil, vemos como en Chiapas es palpable su presencia, solo basta transitar por los cruceros de la ciudad y veremos la gran cantidad de niños que se encuentran desarrollando alguna actividad para hacerse de recursos. Niños y niñas alrededor de 8 años en adelante, vendiendo bebidas refrescantes o limpiando parabrisas es el paisaje cotidiano de Tuxtla Gutiérrez, una realidad que no se puede ocultar; en la gran mayoría la necesidad de tener algo para comer llevan a los niños a laborar para apoyar a la familia, aunque también se da la situación de haber abandonado el hogar buscando una mejor vida, y en otras son víctimas de la explotación de personas sin escrúpulos.
Todos los días podemos ver a niños y niñas que corren grave riesgo al estar expuestos en la calle, menores que sin duda alguna crecerán con resentimiento a la sociedad y adoptarán conductas perjudiciales.
Educación, alimentación adecuada, servicios de salud y contar con una familia, son algunos de los derechos humanos que les son violentados a estos menores, ojalá las instancias de gobierno llevaran a cabo acciones concretas y no solo de escritorio para contrarrestar esta situación.
* AMLO debe cambiar de lenguaje. La elección en el Estado de México nos dejó claro que está vigente el acarreo de personas, las despensas, el pago del voto y todas aquellas artimañas que utilizan los partidos políticos para ganar de manera sucia una elección, pero también es importante una nueva forma de llegar a la gente, en este caso Andrés Manuel López Obrador debe ya cambiar ese lenguaje desgastado y cansado de la “mafia en el poder”, caso contrario adiós al 2018.
“Es de valientes sonreír mientras se está hecho pedazos por dentro”.
