La máscara de Parachico en riesgo de desaparecer por artesanías apócrifas

Una mirada que trasmite amor por lo que hace es don Antonio López Hernández, lleva 54 años tallando mascaras en Chiapa de Corzo. Premio Nacional de Artes y Tradiciones 1998, ha instruido a 20 chiapacorceños para que las hagan de manera artesanal, cosa que sólo seis de los mismos han logrado hacer

Marcos García

Chiapa de Corzo.-21 de enero 2015. Una mirada que trasmite amor por lo que hace es don Antonio López Hernández, lleva 54 años tallando mascaras en Chiapa de Corzo. Premio Nacional de Artes y Tradiciones 1998, ha instruido a 20 chiapacorceños para que las hagan de manera artesanal, cosa que sólo seis de los mismos han logrado hacer.

Sin embargo lamenta  que  las máscaras de parachicos tiende a desaparecer debido a la piratería que azota cada vez a los artesanos aunque por lo general la "piratería" de productos nacionales y locales se da por parte de países como China (made in), son los propios lugareños quienes hacen que a una artesanía, declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, se convierta un elemento "apócrifo".

Mientras terminaba de resanar una de esas máscaras de parachico que se venden en el andador de Chiapa de Corzo, don Antonio López Hernández afirmó que son de mala calidad: "Esta pieza, en particular, viene de Suchiapa... sólo tienen un cincelado".

Elaborar una máscara de parachico tiene un sinfín de pasos, como el hecho de pulirla "con esófago de res, matado en Luna llena", el rostro después de pintarlo. Cosa que no incluye las vendidas en los andadores de la heroica ciudad.

"No soy el único que las hace, pero hay quienes regalan su trabajo en las Casas de las Artesanías; cómo viven de la venta, son explotados por estos señores", lamentó.

La compra y venta de los productos se ha vuelvo común en Chiapa de Corzo, pero el maestro Antonio está Los Portales (negocio ubicado frente a la Fuente ese municipio), es uno de los tantos lugares que ofertan este trabajo de mala calidad, haciendo su fortuna por medio de los artesanos: "En vez de que hagan un bien, hacen un mal porque acaban con las técnicas tradicionales -como se llama la dueña-, no sólo es ella, son todos, son unos explotadores, regatean con los artesanos: traje de chiapaneca y de parachico", aseveró.

Las creaciones que se exhiben en los andadores de esta localidad colonial cuestan alrededor de 500 pesos, lo que permite su mayor consumo: "Las máscaras que vendo salen en 2 mil 500 pesos, es un precio justo; no es porque se ha un Premio Nacional voy a cobrar más, hay un alumno que cobra 4 mil pesos una pieza".

Las máscaras comercializadas no son hechas en su totalidad por artesanos de Chiapa, siendo que de otros pueblos han visto en este artículo un "objeto" de alto valor de reventa.

La problemática no sólo es para los que compran y venden las piezas, dijo, sino las dimensiones van a niveles mundiales, siendo que el turista nacional y extranjero adquiere éstas para mostrarlas en su país de origen, lo que da una mala impresión del trabajo chiapaneco; "no es correcto que den esa imagen a la máscara de parachico, y ahora que es declarado como Patrimonio de la Humanidad".

"Las artesanías deben hacerse manuales, no hay que usar tecnología, cosa que no pasa con lo que se vende en las instituciones", consideró.

Esta situación, según él, es para analizarla; "es una explotación de los artesanos, aquí les pagan como quieren", concluyó Antonio, sin antes decir que también los indígenas tsotsiles que venden sus "trabajitos" han sufrido el acoso de los dueños de los andadores: "Mandan fiscales (corre chamulitas) para quitarles sus productos".

La de venta de máscaras de parachico falsas se ha agudizado en recientes fechas, por el hecho de que este personaje es reconocido a nivel mundial.